Las instalaciones solares fotovoltaicas (FV) nos permiten aprovechar la energía generada por la radiación del sol para convertirla en energía eléctrica y así poder utilizarla en nuestros hogares y lugares de trabajo. Los módulos fotovoltaicos serán los encargados de hacer esta conversión de radiación solar en energía eléctrica continua y más tarde el inversor se encargará de convertirla en alterna para nuestro consumo. Entre las instalaciones solares fotovoltaicas podemos encontrar diferentes tipos que deberemos estudiar para poder decidir cuál será la más adecuada y acorde a nuestra situación e intereses:
Para poder tomar una decisión coherente tendré que tener en cuenta varios factores:
- Mis necesidades reales en materia de energía, en este caso, eléctrica.
- La localización y acondicionamiento de mi vivienda/empresa.
- Objetivo a cumplir con la instalación.
- Presupuesto para llevar a cabo la instalación.
A lo largo de esta entrada vamos a intentar dar respuesta a algunas de las dudas que se nos presentan cuando queremos elegir la opción que mejor se adapte a nuestras necesidades reales.
Instalaciones solares fotovoltaicas conectadas a red eléctrica (Autoconsumo):
Este tipo de instalaciones se caracterizan, como su propio nombre indica, por permanecer enganchadas a la red eléctrica, se trata de un modelo de generación distribuida. Priorizan el autoconsumo utilizando la energía de la instalación solar mientras pueden contar con ella y cuando no es así, consiguen la energía de la red eléctrica. Lo que va a diferenciar un tipo u otro de instalación es la gestión de los excedentes, es decir, lo que haremos con la energía generada y no consumida de nuestra instalación.
Instalación FV de autoconsumo acogida a compensación
Este tipo de instalación se caracteriza por utilizar sus excedentes para rentabilizar económicamente aquella energía sobrante que, por ejemplo se genera en los momentos en los que no nos encontramos en el lugar de la instalación y por lo tanto no hacemos uso de ella. Esta energía se inyecta a la red eléctrica y a cambio recibimos una compensación. Este tipo de instalación es la más conocida y extendida: en el sector residencial se utiliza tanto para unifamiliares, como en comunidades de vecinos; también las empresas especialmente el perfil PYME dado que ese ahorro en la factura eléctrica supone un buen incremento de los beneficios empresariales.
Dicha compensación puede adquirir tres diferentes variantes, según el país y la legislación vigente en cada uno:
– El balance neto: por cada kilovatio-hora vertido a la red, el prosumidor tiene derecho a consumir sin coste un kilovatio-hora importado de la red cuando lo necesite.
– Venta a red: se recibe una cantidad de dinero fija por cada kilovatio-hora que se vierte a la red.
– La tarifa neta (compensación): cada kilovatio-hora vertido a la red descuenta de la factura eléctrica una cantidad de dinero determinada.
En España a partir de abril del 2019 queda regulado el autoconsumo con compensación económica a través del 2019 RD 244/2019. Esta regulación decreta un sistema de compensación en forma de ahorro; establece que para las instalaciones menores de 100kW, el sobrante de electricidad generada y vertida a la red genere una compensación que, en este caso, será reflejada en la factura eléctrica, con saldo negativo en el término variable o lo que es lo mismo, aquel que refleja nuestro consumo. Se trata pues, de un descuento en la factura de la luz, que no debemos confundir con la venta directa de excedentes.
Este modelo de instalaciones se ha convertido en un sistema sumamente rentable ya que el gasto en material no es excesivo (paneles FV, estructuras, inversor, cableado, cuadros de protecciones y contador), lo que sumado a la compensación de nuestros excedentes, nos permitirá amortizar nuestra inversión en un periodo de tiempo de entre 6 y 10 años. Un sistema de ahorro muy eficaz si tenemos en cuenta que los paneles podrán seguir funcionando durante 25 años.
Instalación FV de autoconsumo con acumulación en baterías
Esta opción de autoconsumo consiste en inyectar el excedente de energía en la batería que acompaña a la instalación, lo que permite consumirla las horas en las que no hay radiación solar. No obstante, permanecemos conectados a la red eléctrica de tal manera que cuando se nos acaba la energía que tenemos acumulada en la batería podemos seguir consumiendo la que extraemos de la red.
Estas instalaciones tienen algunas ventajas como asegurarse el consumo de toda la energía que generamos evitando pérdidas, tanto de nuestra propia energía, como de la recogida de la red eléctrica en su transporte. Sin embargo, en caso de plantearnos este tipo de instalación, deberemos tener en cuenta la inversión inicial, ya que ésta supondrá un diferencia considerable frente a las instalaciones de autoconsumo acogidas a compensación. El hecho de añadir las baterías al sistema supone un incremento importante en el precio de los materiales, además de que no podemos dejar de tener en cuenta el tiempo de vida de estos productos; por lo que tendremos que estudiar las previsiones de amortización muy detenidamente para asegurarnos de que merece la pena económicamente.
Instalación FV de autoconsumo sin excedentes
La característica principal de este modelo de instalaciones es que no hace ningún tipo de inyección a la red eléctrica, sin embargo toma energía de ella cuando la necesita. Se trata de instalaciones muy parecidas a la anteriores, con la diferencia de que a la instalación le añadiremos un mecanismo antivertido que se comunicará directamente con el inversor para que no se produzca más energía de la consumida y evitará que ésta pase a la red.
Al desechar nuestros excedentes perdemos la oportunidad de aprovecharlos, ni para que otros los usen, ni para sacar algún tipo de compensación o rentabilidad por esa energía que has generado. Este tipo de instalaciones son necesarias cuando la legislación vigente no permite inyectar energía a la red eléctrica.
Desconectadas de la red eléctrica
Instalación FV aislada
Al contrario que todas las anteriores este tipo de instalaciones no se encuentran conectadas a la red eléctrica. La energía eléctrica generada por la instalación se consume en el mismo punto en el que se encuentra la instalación evitándonos la dependencia de la red.
Los elementos necesarios en las instalaciones solares de este tipo incluyen un inversor cargador y un grupo electrógeno que permitirán el almacenamiento de energía para ser utilizada en los momentos en los que no haya radiación solar. El diseño del proyecto de la instalación se calculará para que la energía generada y la capacidad de almacenamiento permitan pasar algunos días sin recibir dicha radiación. Lo que afecta directamente al tamaño de la instalación, suponiendo mayor número de paneles FV en comparación con las instalaciones de autoconsumo, además de la inversión en baterías.
Las instalaciones aisladas son la opción ideal para aquellas viviendas o negocios (como granjas) que se encuentran aisladas de la red, en este caso resulta la opción más económica y sostenible. Sin embargo, hoy en día, si tenemos la oportunidad de autoconsumir no resulta una opción competitiva si nuestra preocupación es la rentabilidad de la instalación. En este caso el objetivo a cumplir es la propia generación de energía en un lugar donde no existe la posibilidad de hacerlo, de una manera limpia y responsable.
ENDEF y las instalaciones solares fotovoltaicas
En ENDEF somos especialistas en adaptarnos a tus necesidades para encontrar la solución que mejor se adecue a ellas. Las instalaciones solares llave en mano son una de nuestras grandes apuestas, sea cual sea tu perfil y sea cual sea tu objetivo.
Nuestro sistema de atención al cliente permite cubrir todas las fases del proceso: nuestro departamento comercial te guiará aportando toda la información que necesites, en ENDEF queremos que las personas sean dueñas de su propia energía y para conseguirlo enfocamos parte de nuestros esfuerzos en formar e informar; en oficina técnica un equipo de ingenieros estudiará tu caso para, con total transparencia, ofrecerte la solución que consideran ideal para atender tus necesidades, además de gestionar todos los trámites burocráticos agregados a una instalación solar; finalmente, nuestro equipo de expertos instaladores harán realidad el autoconsumo llevando la energía limpia a tus manos y permitiendo que generes tu propia energía.
Tenemos la experiencia, la ilusión y muchas ganas de llevar a las manos de las personas la energía tan maravillosa que nos brinda el sol ¿y tú? ahora que seguro que tienes más claros los conceptos básicos… ¿te animas con la sostenibilidad y el ahorro? ¡contáctanos!